Sin lugar a dudas, Jimena de la Frontera, población serrana del interior del Campo de Gibraltar, se ha convertido en los últimos años en un punto de encuentro para el turismo rural y alternativo, así como para los practicantes del senderismo que buscan bellas y tranquilas rutas, alejadas de las aglomeraciones de otros destinos cercanos y agobiados por el turismo de masas.
Este pueblo de 10000 habitantes está en pleno parque natural de Los Alcornocales, rodeado de magníficos bosques de alcornoques en un excelente estado de conservación, así como numerosas e importantes cuevas rupestres de alto valor, destacando «Laja Alta», la cual consta sólo de un abrigo, con forma de concha y abierto a levante, midiendo aproximadamente unos cinco metros de ancho por tres metros de fondo y de alto.Las pinturas las encontramos en la zona derecha de la cavidad, se intuye que habrían más en la izquierda, pero las inclemencias meteorológicas debieron de acabar borrándolas. De todas las pinturas destacan las de los barcos, un total de ocho, con altas proas y velas en forma triangular.
Pero si es conocida esta población en los últimos años es por sus jornadas micológicas, unas de las más importantes a nivel andaluz y nacional, ya que en sus bosques podemos encontrar una variedad increíble de setas de todos los tamaños y gustos.
Para los amantes del senderismo, Jimena ofrece una gran variedad de rutas tanto para iniciados como para la familia.Para poder realizarlas, lo mejor es llegarse por el punto de información, instalado a las faldas del Castillo y en donde podremos encontrar planos y croquis, así como la guía «Andar por el Campo de Gibraltar» donde también se recogen dichas rutas.
Una paseo bonito y familiar es la de «La Real fábrica de Artillería» o también conocida por los lugareños como «Fábrica de las bombas». Un itinerario éste de poco más de 3 kilómetros y medio y de baja dificultad, que transcurre rodeando el pueblo, y partiendo desde la «Pasada de Alcalá» por un carril y sendero bien marcados y en el cual podremos ver los restos bien conservados del canal de la Real fábrica de Artillería, construido para conducir agua que movían los fuelles de los hornos, donde se fabricaban las bombas para el asedio de Gibraltar, comenzando a funcionar en 1780. Uno de sus muros fue restaurado en el año 2002, pues se derrumbó por las crecidas del río. A lo largo del itinerario podemos ver varios molinos así como vegetación de ribera junto a Quejigos, Algarrobos centenarios y helechos en su parte media.
Pasaremos entre grandes moles de arenisca donde nos llamarán la atención sus caprichosas formas, talladas por el viento, destacando las localizadas en la parte media de la ruta, de formas muy redondeadas y en las cuales encontraremos huellas talladas en el suelo, del paso de los senderistas y lugareños a lo largo de muchos años. Esta ruta termina junto a la Cruz Blanca, al lado del Camping de los Alcornocales, aunque se puede realizar una variante a mitad de camino, cogiendo por la «Vereda de la encubierta», que nos llevará al casco antiguo, cerca del Castillo, aunque la cuesta es bastante larga y «empinada» sobre todo sus últimos 200 metros.
Para los ya iniciados, podemos realizar la ruta del «Sendero del Hozgarganta», de 13 kilómetros (ida y vuelta). Un bello itinerario en el cual comprobaremos el excelente estado de conservación del río Hozgarganta, denominado «El último río virgen de Andalucía», y que en las épocas de lluvia sorprende su caudal por las crecidas.
La «Vereda de Ubrique a las Asomadillas» es otra bonita ruta para iniciados, de casi 9 kilómetros de longitud y por la cual caminaremos por la antigua calzada romana, entre alcornoques y pinos de repoblación, bajando por un carril que nos conducirá al mirador de «Las Asomadillas», para contemplar el río y, en días claros, Gibraltar y África. Luego tendremos que caminar algunos metros por asfalto para seguir bajando por otro carril hasta el lecho del río, el cual cruzaremos para encaminarnos por el sendero del Hozgarganta, buscando «Casa esquivel» para volver a cruzar el río y buscar el carril que nos conducirá al camping. Lógicamente, en épocas de lluvias será imposible cruzar el río, por lo cual, este itinerario sólo es factible en primavera o verano (cuidado con el calor!!). Existen más rutas interesantes, tales como: «Garganta del Gamero», «Arroyo del Cañuelo», «Lomas de Cádiz». También destacar el Sendero de Gran Recorrido (GR-7) que pasa por dicha población, cogiendo parte del itinerario de «Las Asomadillas» y que se encuentra señalizado con balizas oficiales.
La escalada es otra actividad deportiva que podemos realizar, aunque no tan extendida como el senderismo, pues son pocas las paredes equipadas a tal efecto y las que existen tienen algunos de sus seguros deficientes o rotos. En los márgenes del río, junto a la «Pasada de Alcalá» encontraremos rutas equipadas en 1995 y 1999, que van desde la iniciación en placa tumbada hasta vías verticales y extraplomadas de grado potente para los más exigentes.Una nueva disciplina que toma auge en la zona es la escalada de bloques o más conocida como «Boulder» y que tiene en Jimena algunos bloques y paredes interesantes, con pasos de hasta (7a) y que los escaladores están descubriendo actualmente. Existen muchas grandes placas para los fanáticos de la escalada de adherencia, pero, como en otros lugares, el problema es ponerse a trabajar duro para equiparlas y posterior disfrute de las mismas, aunque, esa es otra historia.
Jimena de la Frontera os espera para que disfrutéis de su naturaleza aún casi virgen y que pretende seguir así por muchos años.
Es una ruta con una vistas preciosas,digna de visitar. La hemos intentado hacer en dos ocasiones, en la primera el desconocimiento del terreno nos hizo perdernos y terminar en la orrilla del río abriendo senderos hasta llegar al inicio de la ruta y en el segundo intento la inclemencias meteorológicas nos hicieron dar la vuelta al poco de empezar el itinerario.A la tercera va a la vencida.
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